¡El Jardín es mucho más que pasto!

En la breve (pero intensa) experiencia de asesora jardinística que he podido acumular en estos meses, puedo decir sin temor a equivocarme que, todos quienes recurrieron a mí, tenían “temas” con el pasto: “que se pone amarillo”, “que está horrible” “no logro que crezca” y así un laaaargo listado de etcéteras.

Es verdad que este preciado vegetal puede ser difícil de reemplazar (nadie puede mandar a los niños a jugar a los penales en gravilla). Sin embargo, en la mayoría de los jardines hay un montón de m2 que no necesariamente deben estar cubiertos de "césped". Si queremos ahorrarnos el agua y la molestia de la mantención, existen varias soluciones entretenidas.

Para mí reemplazar estas zonas por cubresuelos es una buena opción, ya que es económica y menos arriesgada que reemplazar por un macizo por ejemplo. La ventaja de estas plantitas es que en general son super baratas, así que lo que yo recomiendo es comprar un par e instalarlos en el área en cuestión y ver cómo funcionan. Hoy en día existe una amplia variedad en el mercado, tanto para sombra como pleno sol. ¡Muchos de ellos además florecen!.

Si bien la mayoría no resiste bien las pisadas, sí hay algunos que hacen la pelea. Les dejo acá un listado de los que a mi más me gustan: